Repoblación faunística

Como si de animales en vías de extincion se tratara, poco a poco parece que los ex-entrenadores del Madrid vuelven al trabajo. Bueno, hay que matizar: los ex entrenadores incompetentes y babosos. Los buenos trabajan desde hace mucho tiempo. En equipos de fútbol, no en la radio. Menos Capello que ya no es un entrenador: es un dios y hace lo que le da la gana.

Con Camacho al Benfica, el círculo parece cerrarse por momentos. Del Bosque, Remón, Camacho, ¡por fin todos empleados! Bueno, quedaría López Caro, pero entenderéis que la cosa está difícil. Vayamos por partes:

Camacho: entrenador elegante y culto donde los haya, lo hará bien como siempre. Tratará de cambiarle la cara a su equipo a base de instrucciones tácticas como “OP, OP, OP” (ya lo hizo en el Madrid). Su siguiente aportación estratégica creo que será la siguiente: “hay que echarle cojones”. Esto tampoco es nuevo. Frente a sí tiene una dura papeleta, hacerlo mejor que Fernando Santos, un tío que quedó tercero en un campeonato donde juegan tres. Veremos. El Benfica afronta la vuelta de los preliminares de Champions la semana que viene. Que nadie descarte que el careto de Camacho esté paseando por Madrid el jueves, un día después de dimitir.

Remón: bueno, entrenador del Cádiz. A mí Mariano desde luego no me cae nada mal. Es un poco triste, pero sabe hablar y es educado. ¿Os parece poco? Sobre su capacidad como entrenador tengo pequeñas dudas. Creo que es un poco malillo.

Del Bosque: asesor en el Cádiz. El brillante Arturo Baldasano, alias boca de pez, necesitaba una jeta creíble, porque su cara bonita no era suficiente. Vicente cumple sobradamente esta función estetizante. Me dicen, además, que todavía no está preparado para volver a entrenar. Quien le conoce bien asegura (en vía confidencial, eso si) que Vicente sigue dolido por el trato que le dieron al no renovarle hace apenas 4 años. Parece que fue ayer. Si alguien quisiera enviarle un mensaje de ánimo, El Socio estará encantado de daros su dirección. Dirección de correo normal, no correo electrónico. Que por algo su librillo se quedó anticuado.

Y bueno, queda mucha… mhm, ¿cómo llamarla? Mucha gente. Pirri, Míchel, y demás. Por ahora, dómonos por satisfechos.



Y ya que hablaba del Benfica: Hace meses, discutíamos del “síndrome Benfica”. El Benfica, primer club de Portugal sin ninguna duda, con una historia brillantísima por detrás, aquejado por la presión, por la falta de estabilidad, de capacidad y de títulos, se ve superado por un equipo súper organizado como el Porto y un club más pequeño como el Sporting de Lisboa. Más pequeño, pero con un estilo de juego muy definido, un entrenador joven y bueno (Bento) y una cantera fantástica e inagotable (echémosle un ojo, por favor).

Hace unos años el Benfica ganó la Superliga con el veterano Trapattoni, pero no supo dar continuidad al áxito, y entre improvisación e improvisación sigue ahi, enfermo y recurriendo a mini-azotes en forma de Camacho. ¿Os recuerdan a alguien...? El Madrid, que tiene la capacidad económica para cambiar, debe hacerlo ya. Ya mismo.

Algo más tenemos en común con el Benefica: ni aquí ni alli Camacho es la solucion. ¿Calderón? Tampoco. Eso estaba claro.