miércoles, 18 de enero de 2006

Chupao



- Bueno, pues toca partido de esa competición que no interesa a nadie, la Copa (repito: adopten el formato del basket), contra el Betis, "campeón" de la edición anterior. Entrecomillo porque ya se sabe que ganar la Copa es más o menos como ganar la rifa de tu pueblo, por dificultad y trascendencia. Así que seamos serios: Por muy campeón que sea, está en el puesto 16 de la tabla con 19 ridículos puntos. Nuestro deber es barrerlos o volver andando desde Sevilla. Porque la Copa será una mierda, pero si la ganamos nosotros se convierte en un torneo cojonudo. Es más, le daríamos prestigio. Como en los premios Donostia del festival de San Sebastián, que los galardonados le dan relumbrón al premio, y no al revés.

Ah, y Soldado titular. Albricias y zapatetas (para algunos). Lo digo en Enero del 2006: Soldado es un bluff. Prefiero ver a Cassano, que mola más y va a jugar el Mundial y toas las cosas. Pues eso: A ganar.

- "Desertor" Camacho ha dado una conferencia de esas que se dan ahora. Destaco un par de frases:

* "En realidad, la fuerza está en el contrato (...) Ahora se oye mucho eso de 'éste es un hombre de la casa', lo que significa que eres más barato o que serás más manejable y permeable a los consejos de la directiva".

Nosotros hemos tenido varios "de la casa".

* "Existen dos tipos de vestuarios: el que sus jugadores creen que lo saben todo y aquél en donde sus jugadores desean aprender y seguir evolucionando. Hay que trabajar durante la semana y visionar vídeos. Nadie es imprescindible en un equipo".

Premio para el que adivine qué clase de vestuario es el del Madrid.

- Pero para frase impactante impactante la de López Caro: "No hemos conseguido nada". ¡Ahí va, no había dado cuenta!

- Zidane deja el fútbol después del Mundial. Me la pela.

- Titular del Sport el lunes: "Zidane lidera una goleada engañosa". Coño, ¿ya os ha entrado el miedo? Pues me cago en vuestra cara, hala.

3 comentarios:

Daniel dijo...

Camacho: Parias, impresentable y lamentable.

Anónimo dijo...

Camacho es un impresentable y un cobarde, pero no le falta parte de razón.
Me parece que hay elementos en el vestuario que creen que lo saben todo y que por lo tanto no ven necesidad de trabajar.
Eso, al final es un virus y se acaba transmitiendo silenciosamente al resto de la plantilla...incluso a los más jóvenes, que no han ganado títulos.
Camacho, con toda su dureza y los aires de "entrenador estrella en ciernes", no lo logró erradicar, y se piró porque tenía miedo al fracaso.
Parece que lo que funciona con estos jugadores es un técnico en plan "colega" o "padre", como era Del Bosque o como lo es Lopez Raro.

Anónimo dijo...

"Existen dos tipos de vestuarios: el que sus jugadores creen que lo saben todo y aquél en donde sus jugadores desean aprender y seguir evolucionando. Hay que trabajar durante la semana y visionar vídeos. Nadie es imprescindible en un equipo".

Y dos tipos de entrenadores, los que plantan cara o salen con el rabo entre las piernas